El Hábito de Leer

El Hábito de Leer

Imaginar que existen otros mundos, pensar en que las princesas y los príncipes son felices para siempre, soñar que hay monstruos y superhéroes que los combaten o simplemente descubrir que la vida real es sorprendente, hacen parte de lo que podemos encontrar en nuestra fantástica mente cuando nos envolvemos en el maravilloso hábito de la lectura.

Desde niños, uno de nuestros mayores deseos es aprender a leer y soñamos con que el día en que lo logremos leeremos todo aquello que llegue a nuestras manos. Sin embargo, una vez se alcanza este propósito, comprendemos que no todo aquello que nos es posible leer nos gusta. Desarrollamos temas de preferencia para leer y poco nos llama la atención leer aquello que no comprendemos.

Hoy por hoy, en un mundo con tantas posibilidades de entretenimiento, desarrollar el hábito de la lectura se convierte en una proeza, pues esta actividad es considerada poco atractiva e incluso en ocasiones es una acción obligada que solo se realiza a cambio de un posible beneficio posterior.

Los especialistas en lectura están de acuerdo en que leer es un hábito, un placer, que difícilmente se adquiere en la edad adulta. Y que la afición a la lectura tiene muchas posibilidades de consolidarse cuando se ha despertado en la niñez.[1] 

Leer es un hábito que se aprende desde niño, algunos padres manifiestan que  a sus hijos no les gusta la lectura, pero el niñ@ pocas veces cuenta con la experiencia de aprender dicho hábito porque lo ve reflejado en sus padres.

A las preguntas,

1. ¿Te gusta leer?
2. ¿Ves a tus padres leer?

Respondieron:

1. Sí, porque así aprendo mucho, también aprendo a cantar y ser mejor, a ejercitar la mente y ya.
2. No los veo leer.

Santiago Gonzales Molina – 6 años – Grado 1°

1. Sí, me parece muy interesante porque así aprendo lo que dice la lectura.
2. Si veo leer a mis padres.

Paris Antonia Ramírez Lenis – 7 años – Grado 2°

1. Sí, porque me hace relajar cuando estoy aburrida.
2. No veo a mis padres leer.

Ana Sofía Muñoz Duque – 8 años – Grado 3°

1. Sí, porque ahí puedo aprender muchas cosas de historia, matemáticas y también puedo dibujar.
2. Papá casi no lee, mi mamá sí.

Mariana Chica Ortega – 9 años – Grado 4°

1. Mucho, me gustan los cuentos interesantes y me gusta leerle a los niños pequeños ya que ellos se entretienen y se divierten.
2. Mis padres casi no leen, solo lo hacen cuando vamos a la biblioteca.

Laura Sofía Muñoz Castaño – 10 años – Grado 5°

Estudiantes de Mi Bebé Feliz – Liceo Galeón.

Sin duda alguna, cuando los padres brindan acompañamiento desde temprana edad en lecturas con sus hijos,  influyen considerablemente en ellos ya que son los primeros maestros.

El entorno familiar es potencialmente el más idóneo para iniciarlos en conductas asertivas como el gusto por la lectura, pues cuanto antes aprendan a disfrutar de lo que hablan, lo que leen, lo que piensan, entraran en el mundo del conocimiento.

Lina Andrea Plazas Lizcano – Docente Lenguaje

[1] https://www.conmishijos.com/educacion/lectura-escritura/la-importancia-de-la-lectura-en-los-ninos/